Fuerte y firme en sociedad por el Huila

Archivo Tertulia

UNA JUSTICIA SESGADA Y DISCRIMINATORIA

PARA EL RINCON DEL BOTALON
DIARIO DEL HUILA  DOMINGO 4 AGOSTO /13

Indignación y rechazo estamos sintiendo y expresando muchos colombianos ante la arbitraria medida de una juez colombiana que rehusó privar de la libertad a un irresponsable que en estado de embriaguez segó la vida de dos jóvenes profesionales y dejó entre la vida y la muerte a un tercero, considerando de manera absurda y contradictoria que no representa peligro para la sociedad.

A nadie con una mínima capacidad de razonamiento podrá parecerle lógico un argumento tan contraevidente. No se requiere ser experto en leyes para aplicar el sentido común y una pequeña dosis de sindéresis frente a un caso tan oprobioso y discriminatorio. Sin importarle las víctimas, el juez solo muestra preocupación, miramientos y trato privilegiado para con el victimario: lo declara en estado de “schock” ( no tenemos noticia de un procedimiento similar en muchos años en Colombia ) y lo envía a una clínica para que lo cuiden y determinen si está en capacidad de afrontar el proceso, retrasando con ello la diligencia inicial de encauzamiento judicial. Le cabrá alguna responsabilidad a esa juez si el susodicho y mimado jovenzuelo en los próximo días, repite su hazaña y termina con la vida de otras 2 o 3 personas ?

Se nos tachará de no respetar el fuero de los jueces y de no acatar sus dictámenes, pero como ciudadanos tenemos también el derecho a expresar nuestro desacuerdo con ese tipo de determinaciones, a pesar de que en mala hora, habrán de cumplirse hasta tanto una instancia superior no entre a corregirla y, de lógica, inicie la investigación para analizar los motivos ( conformes a derecho o en contra de las normas y protocolos legales; en cumplimiento del ordenamiento legal o al servicio de intereses personales ) que llevaron a esa juez a emitir tan discutible y discutido fallo. Qué pernicioso mensaje está enviando a la ciudadanía, en un país en donde muere más gente por accidentes de tránsito que por causa de cualquier enfermedad y donde el consumo de alcohol sobrepasa los límites de lo racional ? Hay colombianos con “licencia para matar” porque son amigos del juez o pueden influenciarlo a su favor, o porque tienen el dinero suficiente para contratar los más habilidosos abogados que encontrarán el resquicio legal para lograr la impunidad de sus clientes ?

Unos meses atrás otro automovilista, con grado 1 de alcoholemia, atropelló y mató a un transeúnte. Solo uno. De inmediato se le privó de la libertad ( porque ese otro juez lo consideró, sin ninguna duda, peligro para la sociedad ) y se le sentenció a más de 10 años de cárcel , según informan los medios de comunicación. En cambio, el joven al que nos venimos refiriendo tenía grado 3 de alcoholemia y mató a dos personas y dejó gravemente herida a otra: merece un trato más condescendiente y benigno que el anterior ? Porqué esa diferencia ante la ley ?  Si alguien nos dijera que solo la juez tuvo a su disposición otros elementos de juicio para su fallo, inevitablemente esos considerandos deberían haberla llevado a tomar una medida por lo menos igual, sino mucho más severa. 

Casos como éste en que la justicia no opera por igual para todos, han destruido la confianza de los colombianos en su sistema judicial. Casos como éste son factores de violencia que incitan a los “ofendidos y humillados” a hacer justicia por sus manos. Fallos erráticos como éste y sentencias injustas como las que ya han ingresado al anecdotario de lo insólito ( 4 años de cárcel para quien tocó el trasero de una dama y otros tantos para quien robó un medicamento de bajo precio en un expendio, etc. ) vienen a sumarse a otros factores de descomposición del poder judicial en nuestro país: una impunidad rampante de más del 95%, unos magistrados que defienden impúdicamente sus exorbitantes pensiones, una presidente de la Corte que justifica su derecho a hacer turismo en su tiempo laboral y por cuenta del Estado, un magistrado a quien una viuda acusa de haberse quedado con la indemnización que reclamó al Estado por su intermedio, unas Cortes sumisas y obsecuentes frente a un alto funcionario que les tiene a sus parientes con sueldos millonarios en su dependencia, una huelga a todas luces abusiva que logró para el poder judicial sueldos que no devenga ningún otro sector del Estado, etc, etc, son razones suficientes para diagnosticar que el contrato social entre el Estado y sus asociados ha sido quebrantado por parte de aquél, cuando se niega a ejercer la protección a que está obligado, a cambio de que los ciudadanos le otorguen el uso exclusivo de las armas.

Invitación : Todos los Domingos de 9 a 10 de la mañana en Radio Surcolombiana “ Tertuliando con el Botalón”