Tertulia del 25/10/2018
SER PILO PAGA, HOY GENERACIÓN E, SE APOYA EN RECURSOS CORRIENTES DE LA NACIÓN EN LUGAR DE NUEVOS
SPP nació de una tesis doctoral de un estudiante de la Universidad de Los Andes que fue acogida de manera entusiasta por la entonces Directora del SENA y luego ministra de Educación Gina Parodi. Sin embargo, lo dijo el invitado Roque González, el entusiasmo hizo olvidar la necesaria planificación de un programa que hoy bordea los 6 billones de costo y la identificación de fuentes de recursos diferentes a los de la educación por el déficit acumulado de las universidades públicas que alcanza los 18 billones de pesos. Esta combinación ha complicado más las cosas en el sector educativo desde el punto de vista presupuestal y la nueva edición del programa, “Generación E” simplemente repitió mucho de los errores de Ser Pilo Paga, SPP.
CREACIÓN JUSTIFICADA PERO NO PROYECTADA ADECUADAMENTE
De acuerdo con los indicadores de la educación, en 2014, año de creación del programa, este contaba con total fundamento. La tasa de Cobertura era de 52.8% a nivel nacional (en el Huila 35%) y del 60% de los que sacaban buen resultado en las pruebas saber 11 que todos los bachilleres deben presentar para su ingreso a la educación superior, 23% no ingresaba a la universidad por diversas razones, especialmente económicas. No obstante, la falta de planificación produjo un desplazamiento de los “pilos” hacia las universidades privadas que no tenían problemas de cupos pues contaban con mejor infraestructura y calidad que las Instituciones públicas que por el permanente déficit tenían serios problemas en estos rubros. Se produjo así una inequidad generada por la mayor participación de las universidades privadas en el programa SPP que llegó, en el primer grupo al 84.27% y en el segundo a cifra similar.
TRANSFERENCIA DE RECURSOS FINANCIEROS
Estos resultados significaron una transferencia de recursos que antes iban a las universidades públicas para las universidades privadas dificultando más el déficit de las 32 universidades estatales. Como no hubo planificación de SPP, este impacto no se previó y hoy, para continuarlo, se requieren 3.5 billones de pesos que se espera provengan de otras fuentes y no del propio y deficitario sector de la educación superior.
FACTORES A CORREGIR
Con la nueva versión de SPP, GENERACIÓN E, que busca Equidad, Excelencia y Equipo, de acuerdo con las primeras declaraciones del presidente Duque pues no hay nada reglamentado hasta hoy, se está perdiendo una gran oportunidad y es el direccionamiento de un programa que puede ofrecer mejores resultados. El más importante se refiere a seleccionar aquellas carreras que van a ser demandadas en el futuro con mayor intensidad y para la que la oferta de educación superior aún no está preparada. Aunque, de acuerdo con los datos que nos presentó el Dr. González se aprecia la escogencia mayoritaria de ingenierías en los dos grupos de beneficiarios, no hay seguridad de que estas disciplinas estén actualizadas, por ejemplo, en preparar a los estudiantes en la cuarta revolución industrial que requiere alta dosis de inteligencia artificial. Ojalá en su reglamentación se incluyan estos temas pues un programa de estos no es de cantidad sino de calidad.
La sensación que dejó en la tertulia la excelente exposición del invitado Roque González Garzón se puede resumir en las palabras del contertulio Germán Liévano: ”Un programa de corte populista en época preelectoral que ya no puede echarse para atrás pero sí puede mejorarse”.