LAS ELECCIONES DEL GOBERNADOR
La pasada tertulia la dedicamos al análisis de la elección del gobernador del Huila en unas elecciones atípicas por ser el resultado de la suspensión de su cargo de la gobernadora Cielo González Villa por la Procuraduría por motivos ampliamente conocidos. Nos sirvieron de moderadores los contertulios Félix Trujillo y Jorge Vicente Ortiz.
Unas elecciones también atípicas por cuanto se presentó el Dr. Carlos Mauricio Iriarte representando un movimiento de unidad regional que convoca a todos los grupos políticos del departamento; todos se pusieron de acuerdo en el nombre de Iriarte como candidato, algo impensable. Atrás quedaron las aspiraciones del partido conservador, con tradición mayoritaria en el departamento, que merecía tener candidato propio con muy buenas posibilidades, pero su dirigencia en un acto de suicidio político decidió endosarle su apoyo a su eterno rival el partido liberal representado por su candidato Iriarte.
Los electores se quedaron sin alternativa y fueron muchos los que protestaron por estas maquinaciones de la clase política que independiente de la voluntad de los electores, hacen sus movimientos para colocar una persona de su entera confianza en la dirección del departamento. De esta forma, el partido conservador sin candidato, tenemos que los únicos contendores del candidato Iriarte fueron el voto en blanco y el abstencionismo.
Y el inconformismo se dejó sentir, el candidato Iriarte fue elegido por el 16% de todos los votos posibles del departamento. Este resultado tiene varias lecturas: la principal, el candidato Iriarte sale elegido por una minoría de electores pues éstos no se motivaron por la justa electoral a causa de falta de alternativas. El candidato Iriarte no despertó el suficiente entusiasmo a pesar de salir elegido, su proclamada unidad regional tampoco aportó votos; los que eligieron a Iriarte fueron los votos liberales muy disminuidos. Hay mucho escepticismo y desidia entre los electores como resultado de las maquinaciones de la clase política. El voto en blanco que se perfilaba como un voto protesta para invalidar la elección de Iriarte y mantener la interinidad, no prosperó y la ex gobernadora González Villa que lo apoyó abiertamente también naufragó, afortunadamente.
De todas maneras el resultado es un premio a la perseverancia del candidato que logró su meta después de muchos intentos y elecciones perdidas, llega muy comprometido con toda la clase política del departamento, encuentra una administración sin recursos pues la ex gobernadora apropió fondos por medio de las famosas vigencias futuras o sea que la olla quedó raspada por lo menos para este año. No le queda fácil. En lo político, vemos que Iriarte con su victoria se consolida como jefe del partido liberal.
Su plan de gobierno es algo difuso, manifiesta intención de apoyar la competitividad del departamento y el turismo, pero proyectos concretos no los hay, el tiempo ha sido muy corto para preparar un buen plan, pero es una oportunidad para enderezar y arreglar muchos entuertos dejados por la administración pasada, en especial la cantidad de obras inconclusas y elefantes blancos por todo el departamento. El gobernador es el funcionario más importante y poderoso del departamento quien tiene alta influencia en la ciudad de Neiva, puede corregir el rumbo de los proyectos de las EPN puesto que él fue Gerente de las mismas, es la esperanza que tenemos.
Pero salió ganando el departamento del Huila pues finalmente salimos de este estado de interinidad gubernamental generado por la suspensión de la Gobernadora, el departamento está parado y los recursos que se mueven son muchos y determinantes para un departamento donde el mayor empleador es el Estado, además genera muchos contratos de todo tipo que mueven la economía del departamento. Le deseamos al Dr. Iriarte muchos éxitos en su gestión como gobernante del departamento.