SERA POSIBLE TANTA BELLEZA ¿?
PARA EL RINCON DEL BOTALON DIARIO DEL HUILA – marzo 3 de 2013
Esta semana en La Tertulia logramos concretar una antigua aspiración como era la de escuchar directamente a los constructores del Proyecto Hidroeléctrico de El Quimbo. Y qué mejor cuando apenas hace tres semanas estuvo invitado también por nosotros el Profesor Miller Dussán caracterizado opositor del proyecto y representando a los miembros de Asoquimbo que han mantenido una heroica resistencia civil hace varios años . Fue así como compartieron con nosotros el director general del proyecto ingeniero Antonio Sarmiento y el Dr. Camilo Castrillon, Relacionista Público de la empresa, asi como otros altos asesores. La verdad es que la impresión inicial fue muy grande. Parecía que estuviéramos hablando con otra empresa, sobre otro proyecto, en otro país. A diferencia de la arrogante posición exhibida por los funcionarios españoles que anteriormente se presentaron en público, este grupo directivo mostró una posición conciliadora y aceptaron inclusive en forma autocritica errores en el manejo del proyecto especialmente en la relación con la comunidad y el impacto ambiental. Parecía que hubiesen traído una lista de chequeo con todo lo expuesto por Asoquimbo para ir dando respuesta punto por punto a sus principales demandas, aunque lógicamente no se refirieron a la manera como se otorgó y se manipuló la Licencia Ambiental lo cual ha sido uno de los puntos que más inconformidad ha generado en toda la región. Sin embargo debe anotarse con beneficio de inventario que la posición de Emgesa ha cambiado en forma importante y sólo el tiempo dirá si se va a cumplir todo lo prometido. En primer lugar a pesar que en su presentación se mantiene la definición de que es un embalse unipropósito (es decir sólo para producir energía) admiten la necesidad de cumplir una amplia gama de compromisos adquiridos a través de las Mesas de Concertación las cuales fueron el producto de la inconformidad regional patrocinada en especial por los anónimos pescadores y agricultores de Asoquimbo a quienes les debemos en buena parte del proceso de obligatoria negociación con la comunidad. Además aceptaron en forma por demás vergonzosa para nuestra dirigencia regional que se hubiese podido negociar mucho más , inclusive hasta que el Huila fuera accionista del proyecto, pero que a diferencia de los proyectos de Antioquia y otros en nuestro caso no hubo mayores exigencias que las suscritas en las Mesas de Concertación. El proyecto apenas tiene un retraso de mes y medio y espera producir energía en diciembre del año entrante confirmando más del 33 % ejecutado contra un 39% proyectado. En cuanto a las demandas de la comunidad expresan como uno de sus logros mas importantes la capacitación formal como microempresarios de mas de 1000 personas en asocio con el Sena, de las cuales se han graduado mas de 900 .El proceso de reasentamiento admiten que ha sido muy lento y aceptan un lío con las tierras que el gobierno debe comprar (qué absurdo ah? ) pues no es fácil conseguir 2400 hectáreas en esa zona para darles irrigación y mejorarlas por lo cual se estudia la posible opción de buscar tierras en otras zonas. Los proyectos productivos que han venido apoyando muestran cifras similares o incluso mayores (como en el número de bovinos) a los que estaban antes de la intervención –difícil de creer- para lo cual debe mantenerse un estricto seguimiento. Expresaron también la existencia de programas para resguardo de la flora y la fauna regional, así como de los hallazgos arqueológicos. También aceptaron la necesidad de concertar con los empresarios piscícolas y anunciaron que ya lo están haciendo. Dijeron estar de acuerdo para la construcción de la carretera perimetral con modificaciones al proyecto original en aras de mejorarlo y con la posible construcción del puente más largo del país que podría ser un nuevo atractivo turístico de la región. En fin se escuchó un nuevo lenguaje en un tono distinto al que conocíamos. Quedan grandes dudas y grandes retos. Perder mas de 8.800 hectáreas de buenas tierras en aras de la producción de energía para la exportación sin siquiera obtener la mínima reducción de costos para nuestro consumo doméstico y con un empleo temporal con gran desarraigo del tejido social es una deuda muy grande de los dueños del proyecto (Enel de Italia) para con nuestra región. Tendrá que valorarse con gran responsabilidad la intención de nuevos proyectos en la cuenca alta del río. Nuestra dirigencia tendrá un grave compromiso de vigilar el cumplimiento de lo prometido y los organismos de control habrán de dirimir los conflictos que persisten y se proyectan. Cuando uno observa la protesta social masiva que sacude el país ya estigmatizada con el tinte de subversión y la inoperatividad de los mecanismos institucionales para responder la inquietud popular, crece la duda de lo que pueda pasar con nuestra comunidad ante la construcción de la represa. Sin embargo nuestro escepticismo siempre será positivo porque creemos y aspiramos a un mejor futuro.
